Nutrición adecuada en adultos mayores: claves y mitos

La buena alimentación es un factor clave para envejecer con salud, energía y dignidad. A medida que el cuerpo cambia con la edad, también cambian sus necesidades nutricionales. Sin embargo, existen muchos mitos sobre lo que deben —o no deben— comer las personas mayores, lo que puede generar confusión o incluso poner en riesgo su bienestar.
En este blog vamos a ver cuáles son las claves de una nutrición saludable en la tercera edad y a desmentir algunos de los mitos más comunes.
Claves para una buena nutrición en adultos mayores
1. Comer variado y colorido
Una dieta equilibrada debe incluir frutas, verduras, cereales integrales, proteínas (como carnes magras, huevo, legumbres o pescado) y grasas saludables. Entre más color haya en el plato, más nutrientes se están consumiendo.
2. Hidratarse bien
La sensación de sed disminuye con la edad, pero el cuerpo sigue necesitando agua. Es recomendable tomar al menos 6-8 vasos de líquido al día, ya sea agua, caldos, infusiones o jugos naturales sin azúcar.
3. Asegurar proteína suficiente
El músculo se pierde más fácilmente en la tercera edad. Consumir suficiente proteína ayuda a conservar la masa muscular, fortalecer el sistema inmunológico y mejorar la cicatrización.
4. Cuidar huesos y articulaciones
El calcio y la vitamina D son fundamentales para prevenir la osteoporosis. Se pueden obtener a través de lácteos, pescados con espinas (como las sardinas), huevos y la exposición al sol.
5. Comer en compañía
La alimentación no solo es física, también es emocional. Comer solo frecuentemente puede disminuir el apetito. Compartir la comida con otros mejora el estado de ánimo y favorece una mejor nutrición.
Mitos comunes sobre la alimentación en la vejez
Mito 1: “Los adultos mayores deben comer poco”
Falso. Lo importante no es comer menos, sino comer mejor. Una dieta insuficiente puede causar debilidad, pérdida de masa muscular, fatiga y enfermedades.
Mito 2: “No deben comer carne ni grasas”
Falso. Las proteínas de calidad (como las carnes magras, el pescado o los huevos) son esenciales. Y las grasas saludables (como el aceite de oliva o el aguacate) ayudan a proteger el corazón y el cerebro.
Mito 3: “Los suplementos son necesarios para todos”
Falso. No todas las personas mayores necesitan suplementos. Con una dieta equilibrada, muchas veces es suficiente. Solo un profesional de salud puede determinar si es necesario complementar con vitaminas o minerales.
Mito 4: “El estreñimiento es normal en la vejez”
Parcialmente falso. Aunque es más común, no debe considerarse “normal”. Muchas veces se debe a una dieta baja en fibra o líquidos, o falta de movimiento. Con ajustes en el estilo de vida, puede mejorarse notablemente.
Recomendaciones finales
- Comer 3 comidas al día y, si es necesario, 1 o 2 colaciones saludables.
- Adaptar la textura de los alimentos si hay dificultad para masticar o tragar.
- Leer etiquetas y evitar productos altos en azúcares, sodio y grasas trans.
- Consultar a un nutriólogo o médico si hay pérdida de peso inexplicada, falta de apetito, anemia u otros síntomas.
En resumen
Una nutrición adecuada en la tercera edad no solo previene enfermedades, también mejora la calidad de vida, el estado de ánimo y la independencia. Comer bien es una forma de autocuidado que no tiene edad.